Descubre los errores más habituales entre los profesionales de la hostelería.
Error #1: No tomarse en serio el negocio
“La hostelería ya no es cosa de aficionados”. Con seguridad nunca ha sido un negocio para aficionados, pero durante años se podía disimular ante la vorágine consumista y la falta de nivel de exigencia del cliente medio.
Ahora hace unos años que no, el cliente es muy exigente, la competencia media ha subido su nivel y la vorágine consumista lo es menos y tiene más donde escoger.
Abrir un bar o restaurante ya no es unir cuatro ideas ingeniosas y fútiles y ponerse a servir lo que a los inversores les gusta comer y beber.
Ahora el negocio va en serio: hay que construir un concepto sólido, crear una marca, buscar la coherencia y la innovación, y saber gestionar.
Si en 2019 el empresario NO SE TOMA EN SERIO su negocio y sigue pensando que basta con poner algo de comer, tener alguna idea graciosa -para él- (o ninguna idea) y listo, el desastre está servido.
Error #2: Ser un tabernero y no un empresario
Un negocio de hostelería es una EMPRESA, no es un juego, no es una ONG. Es una empresa como cualquier otra. Tanto es así que además la hostelería es uno de los negocios más complejos del mercado por la diversidad de necesidades que se deben cubrir en paralelo.
La persona propietaria de un negocio de hostelería tiene que ser un gerente, saber de gestión y dedicarse a la gestión de su negocio. NO BASTA con saber cocinar, poner copas o ser simpático.
El negocio, la gestión del negocio, la tiene que llevar alguien y tiene que ser eficiente…y no, el gestor administrativo que te lleva los papeles NO ES UN GERENTE DE NEGOCIO.
Por otro lado, hoy cualquier negocio se gestiona con herramientas digitales, si no has incorporado gestión digitalizada a tu negocio, el futuro se te presenta complicado.
Si en 2019 NO SE ES UN EMPRESARIO HOSTELERO las cosas van a ir mal, muy mal.
Error #3: Saberlo todo sobre la restauración
“¿A mí que me vas a contar que yo no sepa o no hayas visto ya?”, expresión típica y tópica del hostelero vago, aquel que no piensa mover un dedo para salir de su zona de confort y que no piensa a hacer nada para mejorar su gestión.
Es el perfil del capitán que se hunde con su barco, un barco que se ha encargado él solo de hundir pero no lo reconocerá nunca; la culpa siempre será de otro, de una crisis o de los jóvenes que ya no saben lo bueno que es comer menú o ir de bares (de su estilo).
El empresario que viva de espaldas a los avances del mercado, a lo que le dice cada día su cliente o el cliente potencial que no le visita está tocado y camino de hundido.
Si, además, hace años que no se forma y le parece que el concepto “formación” es un cuento chino y un gasto, y que él y su equipo no necesitan aprender nada (aquello de “a mi gente ya la enseño yo” cosa que nunca hace, ciertamente) la catástrofe está servida.
Si en el 2019 ya crees SABERLO TODO es que en realidad no sabes nada y te irá todo mal
Error #4: No salir a vender
Los hosteleros tenemos la mala costumbre de pensar que basta con levantar la persiana, que los clientes ya vendrán. Como mucho ponemos un anuncio en alguna revista local o “colaboramos” a desgana en alguna pancarta de las fiestas del pueblo o del barrio.
En los últimos años se ha puesto de moda los de tener redes sociales (¡je!). Pero no, es un error garrafal pensar que un bar o restaurante son diferentes a cualquier otro negocio y NO HAY QUE SALIR A VENDER.
La realidad es la contraria, hay que salir a vender, hay que tener actitud y actividad comercial y tienes que promocionar tu negocio.
Entre los planes del hostelero para 2019 es imprescindible tener un presupuesto para invertir en marketing y comunicación, tener un plan para vender el negocio y SALIR (sí, ¡¡¡SALIR!!!) del negocio para hacer actuaciones comerciales y de venta.
Si en el 2019 NO SALES A VENDER..., ¡no venderás!
Error #5: Ser uno más
Si en 2019 ERES UNO MÁS…serás uno menos (esta frase se la he robado a Domènec Biosca, pero es que es muy buena…).
La mediocridad es el peor error de un restaurante. Ser un bar o un restaurante en la media, hacer lo que hacen todos, estar en lo que hace la competencia en general, es el primer paso para no llegar al 2020.
Si el amable lector se plantea abrir un negocio hostelero en 2019 y su concepto de negocio es uno de “los de siempre”, en breve será uno de los que “siempre fracasan”.
El CONCEPTO DE NEGOCIO es clave para sobrevivir en este sector y ganar dinero. El empresario tiene que analizar el mercado, su entorno, su competencia, las tendencias y construir un concepto sólido, diferencial y de mucha calidad.
Si en 2019 SIGUES SIENDO UN MÁS…, en 2020 no te interesará leer información de restaurantes: no tendrás ninguno.